TE BESARE.
Te besaré con el ansia inmaculada del amor,
haciendo mis ternuras galopar dentro de ti,
uniremos de nuestros alientos su candor,
inmersos los cuerpos en incitante frenesí.
Mezclaremos mieles de la sensualidad,
fundiendo los labios en tórrida caricia,
detendrá su instante el divagado tiempo,
cautivo de ese beso que oculta tu sonrisa.
Te besaré con las ansias puras del amante,
pretendiendo aspirar tus sutiles esencias,
mi cuerpo estremecido, trémulo y delirante,
se aferra a tu delirio con pasiones intensas.
Besare tus labios haciendo mía la ternura
y la tersura carmesí de tus labios amantes,
prendida en mi retina de tu faz la hermosura
degustando de esta caricia tan sutiles instantes.
Autor: Víctor A. Arana,
(VICTOR SANTA ROSA),
Cincinnati, Septiembre 2 del 2010.
El Beso es la primera caricia que sublimiza un amor verdadero. Es primo impulso para el romanticismo y ambrosía que perfecciona y arraiga el sentimiento para quién se ama. No hay cita en un idilio que no apetezca un beso, son los labios de la persona amada un manantial que sacia la sed en el desierto de la caricia y el alma. Un encuentro romántico sin beso es jaculatoria para el deseo que es atraído a la boca incondicionalmente cómo inerte metal a la influencia del imán.